En los últimos meses, se ha hablado ampliamente sobre la brecha digital que enfrenta el país, especialmente en las zonas rurales y alejadas. Existen diversos factores que podrían contribuir a lograr la tan esperada inclusión digital, entre ellos, la neutralidad de la red y cómo esta puede fomentar el desarrollo de infraestructura a través de terceros.
¿Es posible compartir las redes? Por supuesto que sí, y esto resulta altamente beneficioso para hacer más rentable el mercado de las telecomunicaciones y, en consecuencia, permitir que el usuario final acceda a un servicio de Internet de calidad, rápido y eficiente.
José Luis Olivera, director de expansión de InterNexa Perú, explica cómo se puede alcanzar esta neutralidad y cuáles son las ventajas de garantizar el acceso igualitario a todos los contenidos y aplicaciones de Internet, sin discriminación y sin comprometer la calidad de los servicios.
“El crecimiento y despliegue de fibra en los países de Latinoamérica se ha logrado, en gran medida, gracias a la neutralidad de las redes. El hecho de que un operador neutral mayorista se encargue de construir redes neutrales y luego las ponga a disposición de los ISP y operadores les permite reducir drásticamente los costos de construcción e infraestructura. Esto los hace más eficientes y rentables, lo que les permite enfocarse en preservar la calidad del servicio y la atención al cliente”, señala Olivera.
Los distintos ISP y proveedores de contenidos enfrentan grandes desafíos: ser más competitivos y rentables. Ambos objetivos están estrechamente vinculados con el mayor diferencial que el mercado exige y valora: calidad y experiencia para el cliente.
Operadores neutrales
Según Olivera, este objetivo se puede lograr fomentando la sinergia y buscando oportunidades entre los operadores neutrales, los proveedores de servicios de Internet (ISP), las empresas desarrolladoras de servicios y otros actores del negocio. En muchos países de Latinoamérica, los operadores han crecido de esta manera, arrendando rutas y fibras ópticas para manejar los niveles de velocidad que cada uno requiere.
El concepto de redes neutrales está ganando terreno en el Perú. Estas redes permiten que múltiples operadores compartan infraestructura, reduzcan costos de operación y accedan a tecnología de punta, lo que les facilita diferenciarse de la competencia y enfocarse en el crecimiento y mejora de sus servicios, sin asumir las cargas operativas y financieras asociadas al despliegue de infraestructura propia.
Desde InterNexa Perú, se están alcanzando velocidades extraordinarias, ofreciendo un espectro de entre 100 y 400 gigabits en sus servicios de transporte. Además, se están enfocando en el arrendamiento de fibras oscuras y en soluciones de colocación de equipos en sus centros de datos.
“Esto último implica que los clientes pueden ubicar físicamente sus servidores en nuestras instalaciones, conectándolos a nuestra red de alta capacidad. También estamos explorando el arrendamiento de puertos ópticos en redes energéticas”, detalla Olivera.
Para 2025, se espera un crecimiento importante y sostenible del Internet fijo en el país, impulsado por la expansión de las redes 5G y de fibra óptica. Esto abre una nueva oportunidad para explorar el uso de redes neutrales, con el objetivo de garantizar servicios de calidad y alta velocidad.