La provincia de Pisco, en Ica, es uno de los puntos claves para la economía y el turismo en el Perú, y al ser zona de influencia directa de las operaciones del Consorcio Camisea, esta empresa aportó S/ 253 millones desde el inicio de sus actividades en el 2004 hasta la fecha, en favor de más de 160 mil vecinos.
La contribución de Camisea permitió a la provincia de Pisco obras de agua y saneamiento, mejora de vías, seguridad ciudadana, áreas verdes y ornato, recolección de residuos sólidos, emprendimiento, educación, salud, turismo y desarrollo de la pesca, acuicultura y maricultura.
También proyectos emblemáticos como la reconstrucción del desembarcadero pesquero en el distrito San Andrés, el Fondo Paracas que otorgó USD 7 millones de dólares para beneficio de la Reserva Nacional de Paracas (RNP) o la reconstrucción de la casona donde vivió el libertador José de San Martín, próxima inaugurarse.
Uno de los aportes más importantes otorgados por Camisea es el Compromiso Marco, un fondo de S/ 100 millones de soles entregado de forma voluntaria por la empresa para los ocho distritos de Pisco, que permitieron el financiamiento de distintos proyectos locales, como el proyecto Aprender para Crecer, que contribuyó a la mejora en la enseñanza para 8,000 estudiantes de primaria de colegios públicos, o Pisco Emprendedor, que generó fuentes de ingresos propias para más de 1,500 jóvenes.
El aporte de Camisea permitió la construcción de mercados, colegios, redes de agua y locales comunales, proyectos de capacitación a docentes, donaciones de camionetas de patrullaje para iniciativas de seguridad ciudadana y camiones compactadores para las municipalidades de la provincia. También se incluye la entrega de nuevos vehículos y ambulancias para los bomberos y equipos como una cámara hiperbárica al Hospital San Juan de Dios de Pisco.
Pero la responsabilidad de la empresa va mucho más allá. Durante la pandemia por coronavirus, el Consorcio Camisea colaboró con más de 7 millones de soles para equipos de bioseguridad, alimentos, implementación de salas UCI del Hospital San Juan de Dios, una planta de oxígeno medicinal para salvar vidas de pacientes COVID-19 y demás materiales de uso urgente en el contexto de la emergencia sanitaria.
En las últimas semanas, la empresa también concretó una iniciativa que beneficia a unos 100 mil vecinos de la provincia. Esto gracias a la instalación de un equipo tomográfico en el Hospital San Juan de Dios, que evitará el riesgoso traslado de pacientes a centros de salud de Lima o Ica, y permitirá evaluaciones y diagnósticos rápidos en la misma ciudad.
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