El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha dejado muy claro que cualquier interferencia exterior en la guerra de Ucrania tendrá «una respuesta inmediata». Además ha amenazado a la OTAN y a Estados Unidos con «consecuencias más grandes de lo que ninguno de ustedes ha visto jamás en la historia» en el caso de que decidieran intervenir.

Durante su discurso presidencial con motivo de la «operación especial en Donbass», que es como el Kremlim se refiere a la guerra, Putin ha asegurado que «los principales países de la OTAN están apoyando a los nacionalistas extremistas en Ucrania». También ha pedido al pueblo ucraniano que no siga las órdenes de la «junta antipopular» (expresión utilizada para referirse al gobierno ucraniano).

«¡No sigan sus órdenes criminales! ¡Les insto a que depongan sus armas de inmediato y se vayan a casa! Todo el personal militar podrá salir de la zona de combate», ha asegurado Putin. Además, ha insistido en que «toda responsabilidad por un posible derramamiento de sangre recaerá enteramente en la conciencia del régimen que gobierna en el territorio de Ucrania».

Justo después, Putin ha amenazado a Estados Unidos y el resto de Occidente en el caso de que quisieran intervenir para ayudar a Ucrania: «Quien intente interferir con nosotros desde el exterior debe saber que la respuesta será inmediata y conducirá a consecuencias más grandes de lo que ninguno de ustedes ha visto jamás en la historia. Todas las decisiones han sido tomadas, espero que hayan escuchado», ha zanjado el presidente ruso.

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