Los desafíos medioambientales, sociales y económicos son cada vez más evidentes y la sostenibilidad es un factor clave para las empresas. Adoptar prácticas responsables no solo responde a una demanda ética, sino que también genera ventajas competitivas y económicas.
En ese contexto, el Pacto Global de la ONU es la mayor iniciativa en sostenibilidad empresarial, promoviendo principios en derechos humanos, laborales, medioambientales y anticorrupción.
Más de 22 000 empresas en el mundo forman parte del Pacto Global, a fin de acelerar la transformación hacia un modelo más sostenible. En Perú, 111 empresas han asumido este compromiso en 31 sectores, generando empleo a más de 400 mil personas. Esto confirma que la sostenibilidad ya no es solo una tendencia, sino un pilar esencial para el desarrollo empresarial.
Uno de los mitos más comunes es el alto costo de implementación de prácticas y proyectos de sostenibilidad. Sin embargo, estudios de Dun & Bradstreet indican que las empresas con un sólido desempeño en ESG (impacto ambiental, social y de gobierno corporativo) superan hasta en un 30% el volumen de ingresos, de aquellas que no priorizan estos aspectos.
Además, la sostenibilidad influye en la atracción y retención de talento.
Según Deloitte, el 40% de los millennials ha rechazado empleadores que no se alinean con sus valores de sostenibilidad, y el 75% de millennials y generación Z consideran el impacto social de una empresa como un criterio clave al elegir dónde trabajar.