A consecuencia de las temperaturas frías y húmedas, las estructuras de los departamentos y de edificios suelen presentar señales y características inusuales que generan atención. Algunas personas ignoran que, prevenir estas resulta posible si les damos un mantenimiento adecuado.
Precisamente, los expertos coinciden en que la reparación más costosa es aquella que no se hace simplemente por falta de un mantenimiento de rutina que permita identificar y reparar grietas superficiales, pequeñas filtraciones o material disgregado antes de que se conviertan en problemas mayores.
Para evitar costosas reparaciones, Cementos Pacasmayo señala cinco claves para mantener un departamento y estructuras en buen estado:
- Estar atentos a la aparición de grietas en las paredes o techos. Si se trata de un inmueble antiguo, es recomendable tener cuidado de no cargar peso excesivo en las estructuras dañadas con muebles o electrodomésticos pesados.
- Estar atento al daño generado por la humedad, especialmente, considerando el alto nivel que presenta Lima durante la época de invierno. Recuerda que una filtración se puede convertir fácilmente en un problema mayor como la aparición de moho, que es altamente perjudicial para la salud.
- Prestar atención a los elementos de metal, en mayor medida a aquellos expuestos a la intemperie. La humedad produce oxidación y corrosión, lo que debilita las estructuras metálicas y puede afectar los cimientos del edificio.
- Monitorear los sistemas de aislamiento y ventilación. Un buen aislamiento evita desperdicios en cuanto a los sistemas de calefacción o aire acondicionado, reduciendo los gastos en electricidad y ahorrándonos dinero. Mientras tanto, una correcta ventilación evita la aparición de humedad por condensación.
- Revisar los desagües y escurrideros. El mantenimiento periódico de tuberías evitará atascos, humedad y malos olores. Para ello, es importante contar con profesionales que los revisen por lo menos una vez al año. De no hacerlo, podríamos provocar que la suciedad se acumule y solidifique en el interior de las tuberías, evitando la circulación y generando percances.
Es clave recordar que la responsabilidad de conservación de los departamentos en un edificio trae consecuencias colectivas. Esto se vuelve una tarea difícil, pues se debe fomentar la responsabilidad y conciencia de cuidado tanto en la propiedad como en las áreas comunes. Para evitar gastos innecesarios es preciso estar atentos y vigilar los espacios compartidos como garajes, escaleras, ascensores y azoteas y avisar cuando se perciba alguna deficiencia antes de que se convierta en un problema mayor y más complicado de resolver.
